Puedes
Puedes buscarme los puntos cardinales, las risas que me guardo, las cosas que no digo. Tienes permiso para explorarme los lunares, las costillas, los bolsillos y el quicio de la boca.
Puedes buscarme los puntos cardinales, las risas que me guardo, las cosas que no digo. Tienes permiso para explorarme los lunares, las costillas, los bolsillos y el quicio de la boca.
Quiero
A cambio pido una canción, tres poemas, cuatro besos y dos abrazos fuertes. Eso es todo. Eso y olvidar qué es el miedo, la duda, el vacío y todas esas películas que no nos dicen nada.
10 comentarios:
¿Quién puede decir que no? Tengo muchas ganas de darte ese abrazo que hace tiempo no nos damos.
GATO NEGRO
Voy a ir preparando todas esas cosas y a meterlas en una caja. Te la intentaré llevar en persona, que los carteros generalmente tampoco dicen nada.
Tenéis que ir todos al cine a ver una buena peli. Pedidle consejo a nuestra muñeca de las botas rojas, que ella sí que sabe.
Un abrazo que no cabe en los bolsillos.
...me apunto a lo de encontrar canciones y poemas para ayudarte a olvidar cómo se tiene miedo sentado en el salón de las dudas. "...ven aquí..." para perderte por Paris buscando los puntos cardinales y las risas de los parques. No pienso correr, el tiempo no pasará más deprisa y quiero saborear hasta las ausencias. Cuando regrese desde sus costillas, pienso detenerme en cada lunar hasta llegar a esa parte de la boca...
...gracias por la canción que has colgado abajo!!!...
...muy, muy, muy bien.
tus quereres son posibles y lo posible es para quererlo.
una abrazo quita_miedos.
" y te sigo debiendo todavía una canción de amor"
sin duda un buen trato.. yo lo aceptaría.. besos
eeeeeso te iba a decir yo, que la muñeca rota exige que vayamos al cine a ver una mágica. Maybe el viernes después de preparar el viaje...
me vuelvo a d.s.i (Y nolla, of course p4 president! le amamos)
Si quieres puedes ;)
y yo con ganas de llorar como una tonta sólo por ver la foto de abajo y acordarme de que tal vez tengan que pasar otros nueve o diez años para que vuelva a encontrarme con mi electrón perdido.
Id, id en París a la librería de colores y buscad, buscad que ya sabes que sous la rue, la plage... ay, cuántas ganas de llorar, cuántas mariposas de ausencias como diría la maga... cuánto París y qué poco me queda...
No pides mucho (de cuanto se puede dar), para todo lo que das (da cuanto se puede ofrecer). Si te consiguen enseñar a olvidar el miedo, la duda y el vacío, dime algo porfa (eso no creo que se pueda pagar).
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